Translate

lunes, 3 de noviembre de 2014

MEDIO IRONMAN CANET DE BERENGUER – POR ANTONIO


Nueva muesca en mi Colt, nuevo reto conseguido.

Era mi segundo medio Ironman, pero ya con la experiencia del Ironman completo, y eso puede hace que te relajes, que te lo tomes como “algo fácil”. Al menos, esos eran los comentarios de la gente, de amigos, etc…

Y de fácil no tiene nada. De hecho, el cansancio es mayor, en mi opinión. Primero, porque no se entrenan tantos meses ni tantas horas y segundo, porque la prueba la haces más a tope, esforzándote más. Es un planteamiento distinto del ironman, donde vas a regular, a aguantar, a resistir. En un medio, quieres ir más rápido, piensas que no debes ser tan conservador, etc..

PREVIA

Cuando decidí hace unos años intentar hacer un medio ironman, me recomendaron Canet de Berenguer, un pequeño pueblecito situado al norte de Valencia, cerca de Sagunto.  Por unas circunstancias u otras, al final no puede debutar allí, y cambie mis planes para hacerlo en Valladolid, pero ahí quedo anotado en mi agenda, el poder hacer esa prueba algún día. Así es que, como me cuadraban las fechas, pues allí que me fui.

Habían cambiado el patrocinador/organizador de la prueba, y….lamentablemente, no fue tan bueno como prometían o cabe esperar de una prueba como esta, que conlleva mucha preparación física, pero también mental y de material. Son muchísimas cosas a tener en cuenta,, y no es bueno dejarlo a la improvisación, y por lo visto ellos, sí lo hicieron. En general todo bien, pero hay detalles muy feos, que no pueden ocurrir en este tipo de pruebas. A saber; cambio de circuitos de carrera y de bici en el último momento, informan, tanto en página web como en la reunión técnica previa a la carrera, que van a dar bebida isotónica en los avituallamientos de bici y corriendo, y la realidad s que no dieron en ninguno. La pérdida de sales, en un día soleado y con humedad, en este tipo de pruebas es muy grande, por lo que la recuperación vía bebidas isotónicas es muy importante, pero por lo visto a ellos no les parecía tanto. Eliminación de la Pasta Party del día previo y por último, se acabaron las botellas de agua y empezaron a dar vasos de agua….
 

Tras un verano complicado, con problemas de enfermedades de familiares y sin poder entrenar adecuadamente, intenté recuperar sensaciones con los entrenos de Septiembre. No se llega a un nivel máximo, pero me veía bien, con confianza. Quería mejorar el tiempo de mi debut, y los recorridos, y las condiciones meteorológicas eran perfectas, así es que había que intentarlo.

LA PRUEBA

El día amaneció soleado, casi sin aire, y con pronóstico de 25ºc para cuando comenzáramos a correr. Quizá algo excesivo, pero es lo que había!!

No había conseguido dormir nada bien. No eran nervios propiamente dichos, más bien pensamientos de cómo debía afrontar la carrera, revisando mentalmente el material, orden de colocación, comida preparada, etc…el caso es que el descanso no fue bueno.

Tras el desayuno, la entrega y control de material pertinente. Todo listo y dispuesto.

Me puse mi material de guerra y me llevé a Antonio conmigo. Iba  a sufrir yo en esta ocasión por todo lo que el había estado sufriendo y para que cogiera fuerzas para el futuro.
 



LA NATACION

Tras un control de chips bastante desastroso, que hizo que nada más pasar el control yo, se diera la salida, cuando por detrás debían de quedar cerca de 50 personas, me lancé a correr para entrar en el agua mientras me iba colocando las gafas. Eran 2 vueltas a un circuito de 950metros, para un total de 1900metros, con salida a pie por la arena entre las dos vueltas. Me encontré bastante solo nadando, un par de personas alrededor, pero aun así, los nervios, la excitación, la opresión del neopreno, me agobiaron. El agua no estaba casi fría, todo estaba ok, pero yo no conseguía nadar cómodo.  Quien me mandaría a mi apuntarme a esto!! Es la última prueba que hago!! Son pensamientos que corren por mi mente en esos malos momentos. Parecía que la primera boya la alejaban más y más. No había forma de llegar a ella. Son momentos de gran agobio y tensión. Al fin, llegué a esa primera boya. Tras el giro, intenté relajarme y pensar en algo, que no fuera la prueba. Conseguí coger algo de ritmo. A pesar de que estaba muy bien indicado el circuito (boyas muy grandes, y además un barco pegadas a ellas, por lo que era imposible no verlo), me suelo torcer bastante nadando….y tengo que estar continuamente rectificando el camino. Nuevo giro y dirección hacia la playa. En principio, lo más sencillo, pero se me hizo eterno. Salgo en la primera vuelta en 20 minutos, bien!! Subidón. Justo el tiempo previsto! Comienzo la segunda vuelta con esa animación que me había dado ver que no estaba del todo mal. Y además, se me había pasado el agobio, por lo que, sabiendo que no queda mucho y que en breve comenzaría la bicicleta, pues me animaba a continuar nadando. Acabo la segunda vuelta, unos 45 minutos aproximadamente. Curiosamente, la segunda vuelta, peor que la primera, aunque yo tuve mejores sensaciones.

Salgo del agua, corriendo playa arriba, quitándome el neopreno. Momentos de gran agitación respiratoria, llegando a la transición intentando no perder excesivo tiempo y no olvidarte nada.

LA BICI

Salgo con fuerza por las primeras calles del pueblo, adelantando un par de corredores que se lo tomaban con más calma. Me acoplo y a coger ritmo. Voy bastante acelerado de pulsaciones e intento relajarme. Veo una velocidad constante siempre por encima de 30km/h que era mi objetivo, por lo que va todo bien. Eran 4 vueltas a un circuito, totalmente llano, con las únicas dificultades de las continuas rotondas y 3 giros de 180º por vuelta, donde había que tener mucho cuidado. Los kilómetros empiezan a pasar y noto cierto dolor en el gemelo derecho, como si estuviera contraído. Me preocupa, porque sé que si fuerzo, luego no podré correr. No le hago mucho caso y decido forzar y arriesgarme. Creo que puedo hacer una buena bici.

Tras la primera vuelta, donde he adelantado a unos cuantos corredores y no me han adelantado a mí, cojo confianza e intento dar un poquito más. Me lo estoy pasando bien, aunque mi duda es si voy a poder aguantar este ritmo los 90 kilómetros. Veo al resto de los participantes bastante conservadores (con la excepción de los profesionales que van a todo gas!!). Paso 2-3 momentos de apuros, un giro en una rotonda donde de toca el pedal en el suelo, un adelantamiento de un profesional por el medio de un corredor y yo y un bache que me pilla cuando estaba comiendo, que hace que se me mueva la bici peligrosamente….

En la tercera vuelta, ya intento no reservar nada, pero también empiezo a notar que mi fuerte de energía no es infinita….espero que no me dé una pájara!! Por el contrario, el dolor de la pierna ha desaparecido, por lo que no tengo escusa. En esta tercera vuelta, noto como el viento empieza a levantarse, y durante ciertos tramos es algo incómodo y reduce la velocidad media a la que voy. En cualquier caso, sé que llevo muy buen tiempo, y que puedo bajar de las 3h, cosa que no pensaba ni en mi mejor planteamiento.

En la cuarta vuelta, el viento es bastante fuerte. Ya hay zonas complicadas y que se hacen muy cuesta arriba,  o quizá es que mis energías están ya en las últimas. Aprieto los dientes e intento ya ir a lo máximo que me dan ya las piernas.  De vuelta a la transición, cambio rápido para colocarse las zapatillas y a empezar a correr. Me anima mucho ver que he bajado claramente de las 3h. Tiempo: 2h47 (32,3km/h de media).

MEDIA MARATON

Salgo nuevamente acelerado de pulsaciones. Las transiciones es lo que tienen!! Intento relajarme y coger un ritmo cómodo que me permita aguantar todo el trayecto. Noto las piernas flotando, cansadas, sensaciones complejas de describir y que solo se sienten cuando pasas de pedalear a correr.

 


Era un circuito de 3 vueltas, enrevesado, con continuos giros, que hacía, mentalmente hablando, como si fueran muchos más kilómetros.

Empiezo a notar el estómago raro, que no me apetece comer y como hinchado, por lo que no ingiero más geles, e intento beber tragos muy cortos de agua. El calor empieza a hacer mella. Gran deshidratación y perdida de sales que intentaba mitigar echándome agua por la cabeza. Aguanto como puedo unos 5km, pero noto mucho cansancio. Mi cara tiene que ser un poema. Tengo que tirar de mente, de cabeza, pues se me hace interminable el pensar que tengo que hacer una media maratón con este cansancio. Aparece Antonio en esos momentos, que hacen que me emocione y aguanto como sea. Tengo que acabar, independientemente del dolor que sienta. Tras la primera vuelta, en unos tiempos decentes, decido que voy a aflojar a ritmo mas tranquilo. Prefiero perder 5 minutos por vuelta, que acabar reventado. No quiero arrastrarme para llegar a meta.

La segunda vuelta se hace dura y larga. Los tiempos se empiezan a ir, pero quiero esforzarme y así poder hacer un buen tiempo global. Tomo Coca-Cola, y plátano en los avituallamientos y echo de menos los sándwiches de jamón y queso.

El año se hace largo, empiezo a recordar la temporada, todos los entrenos acumulados, desde esas primeras rampas subiendo por El Pardo, las medias maratones corridas para preparar las 2 maratones seguidas afrontadas y los largos entrenos de bici por Cerceda. Ganas de acabar, de descansar, de no apuntarme a nada mas…lógicamente, momentos negativos que pasan por la cabeza por el cansancio que estaba acumulando. Empiezo la tercera vuelta, sabiendo que se me va a hacer muy larga, pero es la última!! Hay que hacer un último esfuerzo. Viene Antonio de nuevo a mi mente y me da las fuerzas necesarias para seguir, para continuar, para no pararme. Esta prueba estaba dedicada a él. Afronto el ultimo km con ganas, sé que voy a hacer un buen tiempo global, mucho mejor que en mi primer  medio ironman.

Cruzo la línea, te ponen la medalla y los sentimientos afloran. Me siento. Intento descansar e hidratarme. Se ha sufrido, pero se ha logrado. Tiempo total: 5h40min. He bajado en 16 minutos mi tiempo. Muy contento.
 

 

Una vez hidratado, la musculatura duele un poco, pero nada del otro mundo. Mucho menos que cuando hice mi primer medio ironman. El cuerpo se habitúa al ejercicio. Tiene memoria histórica. Volveremos a repetir?